Ser vegetariano ayuda mucho al cuerpo porque uno empieza a consumir más cosas sanas y poco grasosas y eso se refleja en las actividades diarias y en prolongar la salud a un futuro si decimos que viviremos mucho tiempo y si uno se come un millón de frutas puede reencarnar en una papaya.
Lo bueno del vegetariano es que se le abre el horizonte social, ya no sólo es el rechazo a la comercialización animal, también se trata del respeto a la vida y el amor a la naturaleza en su conservación y la interacción.
Un día una vaca con bufanda me dijo que no me la comiera, no me la comí y ella me regaló una ensalada de frutas con lecherita y me prestó su bufanda porque ando con gripa por estos días.
Un día una vaca con bufanda me dijo que no me la comiera, no me la comí y ella me regaló una ensalada de frutas con lecherita y me prestó su bufanda porque ando con gripa por estos días.
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